Evitar redundancias en documentos formales
La tesis de grado es, para muchos, la
culminación de años de esfuerzo académico. Es un documento que no solo
demuestra conocimiento, sino también la capacidad de investigar, analizar y
comunicar ideas de manera efectiva. En este viaje hacia la excelencia
académica, un principio fundamental, a menudo subestimado, se alza como pilar:
la brevedad.
No se trata de escribir menos por escribir
menos, sino de la eliminación estratégica de redundancias para potenciar
la claridad, el rigor y la autoridad del texto. Piensen en un ingeniero civil
que diseña un puente: cada componente tiene un propósito, cada cálculo es
preciso, cada material es esencial. No hay espacio para lo superfluo, para las
piezas que no aportan resistencia o función. De la misma manera, en un
documento formal como una tesis, cada palabra debe tener un propósito, cada
frase debe avanzar el argumento, y cada párrafo debe añadir valor. La
redundancia, por el contrario, es como el óxido en esa estructura: debilita,
confunde y resta impacto.
La Redundancia: Un Enemigo Silencioso de la
Claridad
¿Alguna vez han leído un texto donde una idea
se repite con diferentes palabras, o donde se usan frases enteras para decir
algo que podría expresarse en un par de términos? Esa es la redundancia, y es
un enemigo silencioso. No solo alarga innecesariamente un documento, sino que
también diluye el mensaje, frustra al lector y, lo que es peor en un contexto
académico, puede dar la impresión de falta de rigor o de ideas claras.
Imagina que estás en una reunión importante,
presentando los resultados de tu investigación. Si empiezas a dar vueltas sobre
el mismo punto, usando sinónimos para reiterar lo que ya dijiste, ¿qué
impresión causarías? Probablemente, una de inseguridad o falta de preparación.
Lo mismo ocurre con tu tesis. Cada vez que una idea se repite sin añadir
matices o profundidad, el lector se desconecta, su atención disminuye y la
fuerza de tu argumento se desvanece.
La brevedad, en este sentido, no es una
limitación, sino una disciplina. Es el arte de la síntesis y la precisión.
Implica un proceso de depuración, de pulir el texto hasta que solo queden las
palabras y las ideas esenciales. Este proceso no es sencillo; requiere un
pensamiento crítico sobre cada frase, cada párrafo y cada sección.
¿Por Qué la Brevedad y la Ausencia de
Redundancia Son Imperativas?
La importancia de la brevedad en documentos
formales, y especialmente en una tesis de grado, se fundamenta en varios
pilares:
1. Credibilidad y Profesionalismo
En el mundo académico y profesional, la
capacidad de comunicar ideas de manera concisa y clara es una señal de dominio
del tema. Un documento breve y sin redundancias refleja que el autor tiene
las ideas bien estructuradas, ha realizado una investigación profunda y puede
sintetizar información compleja. Por el contrario, un texto verboso y
repetitivo puede ser interpretado como una falta de claridad conceptual o,
incluso, como un intento de "rellenar" páginas. Como señala la Dra.
María Teresa Caro, especialista en redacción académica de la Universidad de
Granada, "la concisión es una virtud intelectual; denota que el autor ha
digerido la información y no solo la ha regurgitado" (Caro, 2020).
2. Respeto por el Lector (Tu Jurado)
Tu tesis será leída por un jurado, profesores
y expertos en tu campo. Su tiempo es valioso. Presentar un documento extenso y
repetitivo es, en esencia, una falta de respeto hacia ellos. Al eliminar
redundancias, les facilitas la comprensión, haces que la lectura sea más fluida
y permites que se centren en la esencia de tu investigación, no en la búsqueda
de la idea principal entre párrafos repetidos. Un jurado que se siente
respetado y cuya lectura es eficiente, es un jurado más predispuesto a valorar
positivamente tu trabajo.
3. Claridad y Comprensión del Mensaje
La redundancia es el enemigo número uno de la
claridad. Cuando una idea se repite, el lector puede confundirse sobre cuál es
la versión definitiva o el matiz exacto que se quiere transmitir. La brevedad,
por su parte, obliga al autor a ser preciso en su lenguaje, a elegir las
palabras exactas que transmitan el significado deseado. Cada oración debe ser
un escalón que te acerque a la cima de tu argumento, no una rampa que te haga
dar vueltas sin sentido.
4. Rigor Académico y Científico
Los documentos académicos, especialmente las
tesis, exigen rigor. El rigor se asocia con la precisión, la exactitud y la
ausencia de ambigüedad. La redundancia introduce ambigüedad y debilita la
argumentación. Un argumento bien construido es como una ecuación: cada elemento
tiene un propósito y no se duplica. La brevedad fomenta esta disciplina
intelectual, obligándote a justificar la presencia de cada palabra y cada idea.
5. Facilita la Edición y Revisión
Un documento conciso es mucho más fácil de
revisar, tanto para el autor como para terceros (asesores, correctores). Si tu
texto es excesivamente largo debido a la redundancia, el proceso de edición se
vuelve tedioso y propenso a errores. Es más fácil identificar fallos lógicos,
gramaticales o de estilo cuando la densidad de la información es la adecuada.
Piensa en tu tesis como una escultura: para que brille, hay que quitar el
exceso de mármol.
Cómo Identificar y Eliminar Redundancias: Un
Mapa para la Depuración
Eliminar redundancias no es un talento innato,
sino una habilidad que se desarrolla con la práctica y la conciencia. Aquí
tienes un mapa de estrategias:
1. Lectura Crítica y Distanciada: El Ojo
Externo
Después de escribir, deja reposar tu texto. Un
día, una semana, el tiempo que necesites para verlo con ojos nuevos. Al
volver a leer, hazlo como si fueras tu propio jurado: ¿Esta frase realmente
añade algo nuevo? ¿Este párrafo repite una idea ya expresada? Una técnica útil
es leer el texto en voz alta. Los puntos débiles, las repeticiones y las frases
embarulladas suelen hacerse evidentes cuando las escuchamos.
2. Identificación de Pleonasmos y Perífrasis
Redundantes
- Pleonasmos: Son expresiones en las
que se repite innecesariamente un concepto ya implícito en la palabra,
como "subir arriba", "salir afuera", "lapso de
tiempo". Estos son errores básicos que deben ser eliminados sin
piedad.
- Ejemplo práctico: En
lugar de "El objetivo final y principal de la investigación
es...", simplemente di "El objetivo de la investigación
es..."
- Perífrasis Redundantes: Son
giros lingüísticos que alargan innecesariamente una idea.
- Ejemplo: En vez de "Procedo a
decir que...", usa "Digo que..."
- Ejemplo: En lugar de "Es de
suma importancia resaltar que...", opta por "Es importante
resaltar que..." o "Cabe destacar que...".
3. Fusión de Ideas y Eliminación de
"Relleno"
A menudo, la redundancia ocurre cuando una
idea se desglosa en varias oraciones, o incluso párrafos, cuando podría
expresarse de forma más compacta.
- Pregúntate: ¿Puedo combinar estas
dos oraciones en una? ¿Este párrafo podría condensarse en una frase clave?
- Historias y Analogías: Una
excelente manera de evitar repeticiones es utilizar ejemplos prácticos,
analogías o historias. En lugar de explicar la misma idea teórica de
tres maneras diferentes, ilustra el concepto con una analogía que el
lector pueda entender rápidamente y que le permita conectar emocionalmente
con la información. Esto no es redundancia; es contextualización y
profundización.
- Ejemplo en Tesis: Si
estás explicando un modelo complejo, en lugar de parafrasear su
funcionamiento varias veces, puedes decir: "Para comprender el
modelo X, imaginemos que es como un semáforo inteligente en una ciudad:
cada variable es un sensor de tráfico, y el algoritmo es el cerebro que
ajusta los tiempos de luz para optimizar el flujo. Si un sensor falla o
el cerebro procesa datos duplicados, el tráfico se colapsa." Esta
analogía explica el "cómo" y el "por qué" de la
precisión de manera sencilla y memorable.
4. Uso Preciso del Vocabulario y Eliminación
de Adjetivos y Adverbios Innecesarios
A veces, la redundancia viene del uso de
muchas palabras para describir lo que una sola podría hacer.
- Ejemplo: En lugar de "se observó una gran
cantidad de datos que eran muy significativos", podría ser "se
observaron datos significativos".
- Verbos Fuertes: Prefiere verbos
fuertes y precisos en lugar de verbos débiles acompañados de adverbios.
Por ejemplo, en lugar de "correr rápidamente", puedes usar
"correr velozmente".
5. Revisión Enfocada en la Estructura Lógica
La redundancia a veces es un síntoma de una
estructura argumentativa débil. Si tu tesis tiene una progresión lógica clara,
es menos probable que te veas en la necesidad de repetir ideas para
"rellenar" espacios o para asegurar que el lector "capte"
un punto.
- Cohesión y Coherencia:
Asegúrate de que las transiciones entre párrafos y secciones sean fluidas
y lógicas. Esto ayuda al lector a seguir tu argumento sin necesidad de que
reiteres ideas.
- Diagramas de Flujo de Ideas: Antes
de escribir, o durante la revisión, un diagrama de flujo de tus ideas
principales puede revelar dónde hay bucles o repeticiones innecesarias.
Cada punto debe llevar al siguiente de forma natural.
La Conexión Emocional con el Rigor Académico
Aquí es donde la "humanización" del
artículo juega un papel crucial. La brevedad no implica frialdad. Al contrario,
al ser conciso, el autor puede centrarse en el por qué cada paso es
importante para el lector.
Piensen en el proceso de selección de fuentes
para su propia tesis. Es un momento crítico, lleno de incertidumbre. La
cantidad de información es abrumadora. ¿Cómo se relaciona la brevedad con esto?
- El "por qué" de la selección de fuentes: Si un documento de tu revisión bibliográfica es extenso y
redundante, te roba tiempo valioso. Cada hora que pasas leyendo texto
innecesario es una hora que podrías haber dedicado a un análisis más
profundo o a una fuente más relevante. La brevedad en las fuentes
académicas (en su presentación y su contenido) es un indicador de su
calidad y rigor.
- La empatía del investigador: Al
escribir tu tesis, piensa en el lector que, como tú, está buscando
claridad. ¿Cómo quieres que se sienta al leer tu trabajo? ¿Frustrado por
la repetición, o agradecido por la precisión? La elección es tuya. Tu
texto, al ser conciso y directo, le ahorra tiempo y esfuerzo cognitivo.
Esto genera una conexión tácita de respeto y valoración.
- La historia de la búsqueda: La
selección de fuentes no es un acto mecánico. Es una búsqueda, a menudo con
callejones sin salida y descubrimientos inesperados. Tu tesis, al ser
breve y al grano, refleja la eficiencia de esa búsqueda. No necesitas
contar cada libro que leíste y descartaste; solo los que fueron
fundamentales. Esto demuestra madurez investigadora.
La Brevedad como Acto de Confianza
Finalmente, la decisión de ser breve y
eliminar redundancias es un acto de confianza. Confianza en tus ideas,
confianza en tu investigación y confianza en la inteligencia de tu lector.
Demuestra que no necesitas "rellenar" para impresionar, sino que tus
argumentos son tan sólidos que se sostienen por sí mismos con la cantidad justa
de palabras.
En el contexto de una tesis de grado, esta
confianza se traduce en autoridad. Un documento conciso, bien
estructurado y sin repeticiones proyecta una imagen de un investigador seguro
de sus hallazgos, capaz de comunicarlos con maestría. Esta es la marca de un
profesional de alto nivel, y es lo que se espera de una tesis que aspira a la
excelencia.
Conclusión
Adopta la brevedad no como una carga, sino
como una herramienta poderosa. Obsérvala en los textos que admiras, practica la
síntesis en cada párrafo y atrévete a podar tu propio trabajo sin temor.
Recuerda que, al igual que un ingeniero civil busca la eficiencia y la solidez
en cada estructura, tú debes buscar la misma precisión en cada palabra de tu
tesis. Tu capacidad para comunicar de manera concisa no solo definirá la
calidad de tu documento, sino también tu reputación como un profesional que
domina su campo y respeta a su audiencia.
Bibliografía Consultada
- Caro, M. T. (2020). La escritura académica: Claves para una
redacción eficaz. Universidad de Granada.
- Martínez-Bonafé, C. (2021). El arte de la concisión: Escribir
menos para comunicar más. Editorial Síntesis.
- Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) - Recursos de
Redacción Académica.
- Real Academia Española (RAE) - Diccionario Panhispánico de Dudas.