Inicio este escrito con algunas
investigaciones realizadas por varias instituciones universitarias sobre una
interrogante ¿Por qué los estudiantes no terminan su Tesis de Grado?* Los
resultados indican que un porcentaje importante (superior al 74%), de los que
inician su trabajo de investigación no lo terminan en el año que corresponde;
y, la respuesta más mencionada como causa fue porque no supieron ni siquiera cómo
iniciarla. En otra palabras, el problema comienza con el arduo trabajo
de iniciar el trabajo (valga la redundancia).
Considero; personalmente, que
todo este inconveniente radica en la combinación de dos términos que asustan: “rigurosidad
científica”, lo que implica no solamente una actividad muy exigente, sino
también mucho trabajo con reglas puntuales que obligan inclusive, a rehacer
varias veces el escrito para lograr un producto dentro de los términos citados y; por supuesto, satisfacer a los exigentes evaluadores y orientadores.
El desafío es asumir el
compromiso; no solamente involucrarse para cumplir con el requisito, preparándose
mentalmente para completar la tarea en un tiempo prudencial para no quedar por
el camino. Recomiendo repetir varias veces “Yo Puedo!”, hasta autoconvencerse
que “Sí,
Puedo!”; y, de allí en adelante demostrarlo con acciones claras que van
a formar parte del primer paso en un sendero difícil, pero no imposible. Atributos
indispensables para lograr satisfactoriamente el cometido son la perseverancia
y la disciplina.
Una forma práctica de de
identificar un tema de investigación es haciendo un recorrido por el programa de estudios
de tu carrera, seleccionando en un principio, varias áreas posibles.
Seguidamente realiza una lectura diaria que profundice los temas seleccionados,
esto te ayudará a generar un orden de preferencia entre los de tu interés.
Luego, define el tema a abordar.
Tómate tu tiempo; pues, todo lo que
viene después depende directamente de las decisiones adoptadas en este momento.
Así también; cuando lo tengas decidido, no escatimes esfuerzos en reunir
información sobre la cuestión fijada como tema a tratar.
Ten en cuenta, hasta ahora solo
conseguiste estar muy próximo a la meta, pero en realidad no lograste nada aún.
Sólo si puedes transitar por este sendero hasta concluirlo, podrás decir con
toda solvencia: “Misión Cumplida. . . Lo Logré”.
*Zorrilla, Santiago y Torres,
Miguel “Guía para Elaborar la Tesis” McGraw Hill 2º Edic. 1992, Pág. 8.-
Muy interesante esta publicación y la que hace referencia al asesor de Tesis, el problema está cuando los alumnos no cuentan con reglas claras por parte de los evaluadores u orientadores que sobre la marcha y según la cara del cliente aceptan o rechazan sus trabajos y tampoco tienen la capacidad ni los conocimientos en áreas donde se estan desempeñando como asesores, con una actitud rígida siendo que el plan de investigación debe ser flexible pudiendo corregir errores o adaptandodas siempre teniendo en cuenta de no cambiar la escencia de la investigación planteada.
ResponderEliminarInteresante enfoque estimada Carolina, para brindar un hilo de luz al tema en cuestión, me gustaría comentar sobre el estado actual de las cosas. Nuestras instituciones todavía no cuentan con un grupo importante de idóneos capacitados para evaluar y orientar trabajos de tesis, lo que se agrava en áreas técnicas de una profesión específica. Aún tenemos un largo camino a recorrer para poder lograr una mejor cobertura. Tenemos colegas que, por temor a cometer errores de fondo, tratan de "salvar" la situación de alguna manera, cubriendo sus falencias con exigencias de rigurosidad extrema sin sentido. Éste es el mayor desafío de tu generación estimada Carolina, analizar con sentido crítico constructivo, para incorporar un saber diferenciado que permita identificar lo bueno de lo malo; y,lo útil de lo inútil.
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